Misericordia hacia miles, 16 de febrero
Los diez santos preceptos pronunciados por Cristo sobre el monte
Sinaí, eran una revelación del carácter de Dios, y dan a conocer al mundo el
hecho de que él tiene jurisdicción sobre toda la heredad humana. La ley de los
diez preceptos del mayor amor que pueda presentarse al hombre, es la voz de
Dios que habla desde el cielo al alma prometiéndole: “Haz esto, y no quedarás
bajo el dominio y el gobierno de Satanás”. No hay negaciones en esta ley aunque
así parezca. Su sentido es: “Haz esto y vivirás”... El Señor ha dado sus santos
mandamientos para que sean un muro de protección en torno de sus seres creados.—The S.D.A. Bible Commentary 1:1105. HHD
55.2
Todo lo que Dios podía hacer lo ha hecho para manifestar su amor y
misericordia para vosotros. “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su
Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga
vida eterna”. Por lo tanto descansad en la seguridad del amor de Dios... Dios
no nos amó porque le hayamos amado primero; sino porque “siendo aún pecadores”,
Cristo murió por nosotros, haciendo una provisión plena y abundante para
nuestra redención. Aunque por causa de la desobediencia merecíamos el desagrado
y la condenación de Dios, él no nos abandonó para dejarnos que lucháramos
contra el poder del enemigo con nuestra propia fortaleza finita. Los ángeles
santos luchan por nosotros, y si cooperamos con ellos, podremos ser victoriosos
sobre los poderes del mal... Si nos acercamos a él por fe, él se acercará a
nosotros, nos adoptará en su familia, y nos hará hijos e hijas suyos.—Carta 98, 1896. HHD
55.3
Comentarios
Publicar un comentario